2022 en Chile: año de pandemia, inflación, desafíos y cambios

El 2022 comenzó prometedor para Chile , ya que en los tres primeros meses de este año las exportaciones del país sureño se incrementaron hasta los USD 25.748 millones , con un crecimiento del 15% respecto al mismo período del

Por otra parte, las importaciones ascendieron a USD 25.763 millones , con un incremento del 33% en relación a los mismos meses del 2021, según los datos de la Subsecretaría de R elaciones E conómicas Internacionales ( SUBREI ).

De igual forma, de acuerdo a cifras del Banco Central de Chile, los embarques de cobre sumaron USD 12.674 millones, creciendo un 6% respecto al año 2021, incremento que se basa en los valores registrados por las exportaciones de cerezas, paltas, ciruelas, salmones, frutas congeladas, carne de ave, madera perfilada y carbonato de litio.

Todo esto representando el 50,3% de las exportaciones del país no derivadas del cobre.


El efecto “rebote” de la pandemia

En medio de la incertidumbre generada por las variantes del coronavirus y el aumento de la inflación, la deuda y la desigualdad de los ingresos, la economía mundial entrará este año en un periodo de desaceleración que se extenderá hasta fines de 2023, según informaciones emitidas por el Banco Mundial.

Según el Informe de Perspectivas Mundiales de esa institución, luego del repunte de 2021, cuando la producción se incrementó un 5,5%, en 2022, el avance será del 4,1% y en 2023 el crecimiento será aún menor 3,2%.

Además, el cambio climático puede aumentar la inestabilidad de los precios de los productos básicos y las tensiones sociales pueden agudizarse como resultado del aumento de la desigualdad económica causada por la pandemia.

En América Latina y el Caribe, el crecimiento se desacelerará al 2,6 % en 2022, para luego aumentar levemente al 2,7 % en 2023 tras registrar un rebote de 6,7% en 2021.

La inflación se ha incrementado en toda la región, y en la mayoría de los casos, ha superado las metas establecidas por los bancos centrales de cada país.

Al mismo tiempo, en países como Brasil, Chile y Paraguay están sufriendo la peor sequía en décadas, lo que ha obligado a su población a utilizar combustibles fósiles más costosos para producir la electricidad que habitualmente es generada a partir de la energía hidroeléctrica

Este año a América Latina le tocó vivir el "efecto rebote".

Como el 2020 fue tan duro para las economías del mundo debido a los efectos de la pandemia de covid-19, las tasas de crecimiento de este año no son muy alentadoras.

La razón es que como el Producto Interno Bruto (PIB) actual se mide en relación al año anterior, pareciera a primera vista, que América Latina dio un salto espectacular.

Pero lo cierto es que se trata de un "efecto rebote" y de acuerdo a la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), la siguiente tabla muestra la lista de países que están incluidos en los estudios del organismo y del incremento o disminución que tendrán sus PIB en 2022.

Inflación: el problema latente

Uno de los dolores de cabeza en el mundo y en América Latina es la escalada de inflación que se ha visto este año.

Aunque el crecimiento se está recuperando paso a paso en la región, el costo de la vida también está subiendo y muchas personas reclaman que el salario no les alcanza para comprar los productos de la canasta básica así como el pago de los servicios.

La mayoría de los gobiernos de la región han tratado de contrarrestar la ola inflacionaria subiendo las tasas de interés de los créditos hipotecarios, bancarios y de consumo, pero esto también afecta a los consumidores en su bolsillo.

El aumento de la inflación ha sido empujado, en parte, por el incremento en el precio de los alimentos, del gas, del combustible, pero también por el conflicto armado entre Rusia y Ucrania.

De igual forma, existe mucha incertidumbre en relación con los precios de las materias primas, los cuellos de botella en las cadenas de suministro y el aumento de los costos del transporte marítimo, además de la posibilidad de que aparezcan nuevas variantes que agraven la pandemia de covid-19.


Expectativas a toda prueba

Las expectativas de crecimiento económico para América Latina en el  2022 son poco alentadoras, no solo por los efectos económicos que ha dejado la covid-19, sino también porque la región tropezó con la pandemia estando en situaciones conflictivas de órden social .

Sumado a este escenario, los recortes del presupuesto público podrían desencadenar nuevos episodios de malestar social, y en ese sentido, la incertidumbre ha limitado la inversión local y extranjera que los países de la región necesitan para recuperarse.

No obstante, debemos seguir transitando este año con optimismo a pesar del panorama que se nos avecina, recordando que las circunstancias pueden cambiar en cualquier momento y es allí donde podemos aprovechar las oportunidades para restaurar la economía y mejorar nuestras expectativas hacia un futuro mejor.

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