LA LOGÍSTICA DE LA AUTOMOCIÓN Y EL FUTURO HACIA LA ELECTRIFICACIÓN

Estudios de Transport Intelligence (Ti) respecto a la logística de la automoción, establecen que se prevé un crecimiento anual plano hasta 2023, pero que el cambio hacia tecnologías de vehículo eléctrico y la economía circular jugarán cada vez más un papel esencial para revertir la situación y reinventar esta industria.El análisis de Transport Intelligence sostiene que la economía circular beneficiará a las compañías con servicios de transporte domésticos, basadas en la carretera o las logísticas especializadas de valor añadido, pero que también habrá consecuencias negativas para las compañías de transporte internacional y transitarios de mercancías.


Electromovilidad

En el ámbito del vehículo eléctricos, los proveedores deberán desarrollar capacidades de gestión de información que complemente al sector. Por eso mismo, BMW, Honda y Toyota, entre otros, han introducido nuevos vehículos eléctricos en el mercado, a la vez que se avanza hacia la sustitución del acero por otros materiales que les ayude a reducir el peso de la carrocería.

¿Más ejemplos? Ford, Jaguar o Audi han empezado a utilizar el aluminio de manera extensiva en sus vehículos, mientras que BMW ha introducido tecnología de chasis con fibra de carbono.

No obstante, la consultora ha vaticinado que el coronavirus continuará creando disrupciones en los fabricantes de equipo y proveedores de neumáticos, de forma que se verán obligados a reducir capacidades y, en los peores casos, a cerrar fábricas.

«El mercado de la automoción ha cerrado 2020 con una caída de volúmenes próxima al 20,4% a escala mundial y con un impacto profundo en todos los segmentos. La industria se ha visto impactada tanto por una crisis cíclica como secular«. detalló en su informe Transport Intelligence.

Agregó que «desde la logística de aprovisionamiento de componentes hasta producción, vehículos acabados y mercado postventa se han visto afectados en todo el mundo«.

Mercados maduros como Estados Unidos, Gran Bretaña y Alemania han sufrido especialmente las consecuencias de la pandemia, mientras que China ha aumentado su protagonismo en la industria.